Aunque aún existen personas que piensan en LinkedIn como una plataforma más donde insertar su currículo, lo cierto es que esta red va mucho más allá y debes prestar atención a los puntos más importantes para optimizar tu perfil.
Foto: Ofrece una primera impresión y debe transmitir una imagen profesional. No utilices la del DNI ni una que tenga un fondo que distraiga; lo ideal además es que sea homogénea con todos tus perfiles profesionales. Por ejemplo, en mi caso, tengo la misma imagen en la cabecera de esta web, en Twitter, en Google + y en LinkedIn.
Titular: Debe ser claro y conciso, e incluir las palabras que habitualmente utilicen los reclutadores. Por ejemplo, aunque seas profesora, en pocas ocasiones buscarán profesionales con ese término específico.
Sector: Define con claridad tu campo de actuación profesional, incluyendo de nuevo términos clave que sirvan para posicionarte.
Extracto: Similar a un elevator pitch, utilízalo para definirte y dar más información acerca de lo que haces y lo que esperas. Este apartado es además un sitio estupendo donde colocar imágenes o archivos de tus trabajos, a manera de portfolio.
Actualizaciones: Como dije al principio, LinkedIn no es un mero escaparate estático para mostrar tu CV, muy al contrario, debe ser un entorno dinámico en el que compartas noticias y datos referentes al sector en el que te mueves.
Contactos: Este elemento va ganando importancia día a día, ya que en muchos casos se considera un indicativo de tu capacidad de influencia, así que cuídalos pero sin que eso signifique que tengas que conectar con ‘cualquiera’.
Aptitudes: Indican en qué campos consideras que te mueves con más soltura o cuáles son tus especialidades, que se verán reforzadas si consigues que tus contactos los valoren y puntúen.
Recomendaciones:Si sabes que a alguien le gusta lo que haces y cómo trabajas, aprovecha y solicita una recomendación, de manera que luego sea visible en tu perfil.
Y como no tengo nada que esconder, consulta mi enlace en LinkedIn.
De todas formas, existe una prueba sencilla que puedes llevar a cabo para ver si tu perfil está bien confeccionado y optimizado. Abre Google, pon tu nombre, y si tu ficha en LinkedIn aparece entre los tres primeros puestos, ¡Enhorabuena!
De esta forma, te resulta mucho más sencillo recordar qué factores debes vigilar.
Muchas gracias por el post Lucia, es conciso y muy informativo. Me falta la importancia de ser coherente con la información que se publica pero quizás no sea tan clave. Me encanta la fotografía a modo de resumen.
[…] LinkedIn es una red profesional con la que podemos conseguir muy buenos resultados siempre que nuestro perfil esté bien configurado. Para lograrlo, te recomendamos que prestes especial atención a los distintos factores clave. […]
[…] es una herramienta que, bien configurada y prestando especial atención a los factores clave, suele dar muy buen resultado. Además, desde hace un tiempo, premia a quiénes mejor participan […]
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